Detección de Patologías graves en la infancia

Cuando se intenta hablar sobre las patologías severas de la Infancia, es necesario realizar un recorrido de la “Media” en el desarrollo de un niño en todas las áreas de la conducta.

Porque de la única manera en que se puede realizar una detección precoz o realizar prevención es sabiendo qué se espera de ese sujeto, de acuerdo a su nivel cronológico, qué se espera que el medio circundante entregue en cada momento de su proceso evolutivo.

Porque al ser humano, no le alcanza con “nacer” para poder ser Sujeto.

Un niño para desarrollarse sanamente, que vaya alcanzando autonomía, que desarrolle la auto-estima, tolere niveles de frustración, madurar y ser feliz, necesita sí o sí de un adulto que lo ayude a hacerlo.

Sin duda fueron muchas las disciplinas que se encargaron de estudiar el desarrollo del niño intentando explicar desde distintos puntos el mismo objeto de conocimiento.

Piaget, Inhelder, Freud, Ana Freud, Dolto, Manoni, Melani Klein, Aberastury y otros en la línea psicoanalistica y principalmente Piaget que explica como se desarrolla la inteligencia humana.

Piaget en toda su obra, si bien no estudia las emociones ni los aspectos psicológicos que acompañan los procesos evolutivos, sí aclara, que en toda conducta inteligente o no hay un acontecimiento psicológico.

Por lo que solo a manera de teoría, es posible realizar una separación del sujeto, porque en el plano real, todas las áreas de desarrollo emocional, psíquico, ambiental, cultural y psicológico se dan en forma simultánea, teniendo todas las variables que pueden o no, intervenir en el niño.

Cuando recibimos a un niño que llega al jardín con diagnóstico de alguna enfermedad genética, hereditaria, metabólica, etc., como puede ser Síndrome de Down, no permite un saber “previo”. Ej: Debido a que el Síndrome de Down cursa con Retraso Mental, estaremos atentos a la estimulación del lenguaje, de los aspectos motores, etc., pero sabiendo que ciertas adquisiciones se darán por fuera del tiempo esperando para la Media.

Sin embargo cuando no hay diagnóstico y el niño menor de 3 años llega al jardín, somos una variable muy importante de detección precoz de ciertas patologías, por lo que tenemos una responsabilidad. Muchas, son las veces que nos encontramos frente a profesional, médicos, pediatras, que nos devuelven la pregunta sobre el retraso en la adquisición del lenguaje con un “ya va hablar cuando madure”.

Resulta que, ustedes por ser docentes especializadas en este momento evolutivo, detectan que si un bebé de 6 meses no realiza juegos de “laleos” silábicos, no busca un objeto que escondí debajo del almohadón, no sonríe frente a la sonrisa de un adulto conocido, o no se angustia frente a un desconocido. “Es señal de algo” y digo señal porque no necesariamente es una patología grave de la infancia pero sí es una “señal” a lo que debo estar muy atento, porque “algo” en el desarrollo no está funcionando bien.

Si me encuentro con un niño de 16/18 meses que no tiene la cantidad de palabras esperables para esa edad; si a los 16 meses no utiliza la palabra como frase, si el deambular por todos los lados y explorar cuanto objeto se ponga adelante; y sus expresiones faciales no son las suficiente claras para que el adulto las reconozca: enojo, tristeza, alegría, debo saber que algo está pasando. Puede ser transitorio? Sí, pero también puede no serlo.

Por lo que vuelvo al punto que es sumamente importante saber qué se espera como media de un niño para lograr detectar a tiempo una patología.